Estos ejemplares no crecen más de 20 cm, su tallo columnar se ramifica a través de nuevos brotes los cuales enraízan con facilidad.
Debemos tener cuidado con sus espinas, como es característico de las opuntias sus espinas son pequeñas pero se desprenden al tacto quedando enterradas en la piel. Lo cual causa una sensación dolorosa.
Requiere de poco riego y una exposición al sol ligera, prefiriendo el sol de la mañana y evitando el de medio día
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